Punta Oliva, ubicado en el Condominio Campestre Mesa de Yeguas, es un proyecto que fusiona el misticismo natural del entorno con una arquitectura sostenible. Situado al borde de un lago de 52 hectáreas, sus 24 villas proporcionan un refugio exclusivo y privado con vistas majestuosas. Sumado a esto, se encuentra ubicado dentro de un prestigioso club que les dará la oportunidad a los residentes de disfrutar de una amplia gama de actividades deportivas y ocio.
La marca refleja esta elegancia y dinamismo con trazos delgados y una tipografía serifada, mientras que la curva distintiva en la letra A evoca el movimiento del agua que rodea el lugar. El símbolo, que simboliza la ubicación geográfica del proyecto, se fusiona perfectamente con una paleta de colores verdes, creando una conexión visual armoniosa con la naturaleza circundante.